Universidades adscritas al programa PACE dan inicio a sus actividades 2024
- La jornada, realizada en dependencias de la Universidad de Concepción, se da en el marco de la celebración de los 10 años de la implementación de este programa.
Con un reporte de las acciones y resultados de la implementación del programa PACE en las regiones de Biobío y Ñuble, se dio inicio a las actividades de la estrategia de Preparación en la Educación Media (PEM), jornada a la que asistieron los equipos directivos de los 88 establecimientos educacionales acompañados por el Programa PACE de la Universidad de Concepción, Universidad del Bio Bio y Universidad Católica de la Santísima Concepción.
Este año, y de forma inédita, la mesa regional PACE, compuesta por los equipos de estas tres instituciones más la Universidad Técnica Federico Santa María, decidió realizar esta actividad de manera conjunta, con el objetivo de visualizar el trabajo colaborativo de las cuatro casas de estudio y para dar inicio a la celebración de los 10 años de este programa.
La Vicerrectora de la Universidad de Concepción, Dra. Paulina Rincón González entregó unas palabras de bienvenida a los y las asistentes al evento, en que destacó que: “acortar la brecha de ingreso a la educación superior es una tarea de la cual no podemos restarnos, y mientras más actores sumemos al proceso, podremos acompañar de mejor modo a nuestras y nuestros estudiantes”.
“Para la Universidad de Concepción el programa PACE se vincula de manera especial con nuestro propio plan estratégico institucional vigente, pues coincide con nuestra orientación a la promoción de la igualdad de oportunidades, relacionada con la equidad, inclusión y la responsabilidad social, valores que cultivamos profundamente en nuestra casa de estudios”, agregó.
En tanto, el SEREMI de Educación de la región del Bio – Bio, Carlos Benedetti Reiman, quien también participó de la jornada, resaltó el valor del programa, que actualmente beneficia a un gran número de establecimientos y estudiantes en la región: “ el PACE fue un pionero en establecer criterios de justicia y equidad en torno al acceso a la educación superior de estudiantes que se encontraban en situación de vulnerabilidad y vino a hacerse cargo de esta brecha y acercar las posibilidades de ingreso a la educación superior”.
Actualmente, más de 15 mil estudiantes de tercero y cuarto medio de las regiones de Biobío y Ñuble son acompañados por profesionales del programa para trabajar en el desarrollo de habilidades transversales y apoyar el proceso de exploración vocacional y de acceso a la educación superior.
Además, como parte del reporte entregado por los Coordinadores Ejecutivos PACE, se informó que más de mil estudiantes ingresaron a la educación superior este año con cupo PACE, destacando que la mitad de ellos optó por la Universidad de Concepción como su casa de estudios.
Ambientes inclusivos en educación superior
Como parte de esta jornada, la profesional del equipo nacional de atención a la diversidad de la división de educación general (MINEDUC), Marcela Villegas Otárola, dictó una charla en torno a la implementación de la ley 21.545, que asegura el derecho a la igualdad de oportunidades y resguarda la inclusión social de personas con trastorno del espectro autista.
Villegas abordó el plan de implementación de esta ley, la que considera etapas de difusión, sensibilización, gestión pedagógica y aprendizaje, bienestar y convivencia y trabajo en redes con los establecimientos, con el fin de crear culturas y desarrollar prácticas inclusivas.
“Debemos transitar hacia un cambio cultural, ya que esto no significa solamente aplicar una norma o un marco jurídico, implica hacer transformaciones en la forma en que visualizamos el derecho a la educación de todos y todas”.
Además, señaló que, en lo que a educación respecta, esta ley busca generar las condiciones necesarias para asegurar una educación inclusiva de calidad y que equipare las oportunidades de acceso, participación y aprendizaje: “la implementación educativa de la ley de autismo nos mandata a fortalecer el sistema educativo nacional desde una perspectiva inclusiva.
“Tenemos un deber con la comunidad autista de acompañar los procesos de innovación y de inclusión en educación superior, además de velar por la existencia de ambientes inclusivos y realizar los ajustes necesarios para asegurar, entre otras cosas, el ingreso y permanencia en la educación superior”, agregó.
La jornada concluyó con un panel en que la expositora y los tres Coordinadores Ejecutivos del programa PACE, respondieron preguntas de los asistentes, vinculadas principalmente a la implementación de la ley de autismo y al trabajo del PACE en los establecimientos educacionales.