Programa PACE celebra 10 años desde su implementación a nivel nacional
- El hito se conmemoró con una actividad realizada en Santiago, a la que asistió una delegación de la Universidad de Concepción compuesta por autoridades de la Dirección de Docencia y la estudiante de Obstetricia Dayris Flores.
Con una ceremonia realizada en el Liceo Benjamín Franklin de Quinta Normal se celebraron los 10 años de la implementación del programa PACE en el país. La actividad, organizada por el Mineduc, fue encabezada por el Presidente de la República, Gabriel Boric Font, acompañado del ministro de Educación, Nicolás Cataldo y diversas autoridades nacionales, comunales y universitarias que se reunieron para conmemorar esta fecha y relevar el trabajo realizado por el programa en estos 10 años.
El programa, que comenzó en 2014 con solo 60 establecimientos y cinco universidades en convenio, actualmente suma 638 establecimientos educacionales acompañados por 29 universidades del país.
Entre los anuncios realizados por el Presidente durante la jornada, está el aumento del 20 al 25% en el tramo del ranking de notas en que deben estar los estudiantes que quieran obtener el cupo PACE, además de garantizar que todas las universidades adscritas al programa dispongan de al menos dos cupos PACE en cada una de las carreras que imparten.
En representación de la Universidad de Concepción, asistió una delegación encabezada por la Directora de Docencia, Dra. Carolyn Fernández Branada, el Jefe del CADE, Jorge Roa Molina, la estudiante de 2° año de Obstetricia y Puericultura UdeC, Dayris Flores Flores, y el estudiante Nicolás Sandoval Montoya, del Liceo Crisol de Mulchén y quien es acompañado por el programa PACE UdeC.
La Universidad de Concepción se sumó al programa el año 2015, y actualmente acompaña a 29 colegios y liceos en las regiones del Biobío y Ñuble.
De acuerdo a lo señalado por Jorge Roa Molina, jefe del CADE y coordinador ejecutivo del programa PACE UdeC, el programa ha mostrado efectividad en estos 10 años y restituye el derecho a la educación superior, sobre todo para los sectores más vulnerados de la sociedad.
Acerca de las proyecciones del programa, el coordinador indicó: “nos planteamos hacer un seguimiento más exhaustivo respecto a que ha ido ocurriendo con los estudiantes PACE, cómo se han instalado en el sector productivo una vez egresados, además de fortalecer el trabajo que hacemos con los establecimientos, sobre todo ahora que aumentará el número de estudiantes que pueden acceder a la Universidad a través de este programa”
“A nivel general, creo que el paso siguiente es empezar a visibilizar todo lo que se ha hecho en estos 10 años y comenzar a generar redes con instituciones externas, para que el programa pueda permear a otras capas de la sociedad y con otros programas, ya sean gubernamentales o no, que permitan hacer un trabajo más coordinado con los establecimientos educacionales adscritos”, señaló.
Un acompañamiento más allá de lo académico
Dayris Flores Flores, estudiante de Obstetricia y Puericultura que asistió a la ceremonia realizada en Santiago, ingresó a la Universidad de Concepción en 2023 gracias al cupo PACE. Respecto a la ceremonia, señaló que: “fue emocionante participar y escuchar a otros beneficiarios que, al igual que yo, tuvieron la oportunidad del acceso y acompañamiento académico en la enseñanza superior. También estaba muy emocionada por la participación de las autoridades del país en esa ceremonia, ya que para mí es genial ver su interés por el programa y su compromiso a que éste progrese”.
Durante su enseñanza media en el Liceo Héroes de la Concepción de Laja, Dayris fue acompañada por las y los profesionales del programa PACE UdeC, y resaltó los beneficios de participar en éste: “ser parte del PACE me ayudó a prepararme y visualizar como era la enseñanza superior. Además, cuando tuve dudas sobre que estudiar, me guiaron y, a quienes participábamos, nos recordaban siempre las fechas importantes del FUAS y la PAES, demostrando una gran preocupación hacia nosotros y nuestro futuro”
Al ingresar a la Universidad, Dayris destaca el acompañamiento académico y emocional recibido por tutores y profesionales del programa:
“Durante mi primer año fui acompañada por una estudiante de Obstetricia y también por las y los profesionales del CADE, quienes estuvieron preocupados de mi adaptación a la vida universitaria la cual, gracias a esto, fue exitosa. También destaco mucho no solo la ayuda académica, sino que la preocupación por lo psicosocial, un ámbito que muchas veces se deja de lado pero que es sumamente importante, especialmente cuando una está lejos de la familia iniciando una nueva etapa”.